Tan simple que complica. Emociones, sentimientos, preguntas, quizá alguna respuesta. Así en estado bruto, desde antes de ser madre y ahora en pleno puerperio. Un alma que se manifiesta mediante la palabra (cuando puede). Tratando de embellecer lo más 'feo' de todo lo que me pasa, y relucir lo más hermoso, de eso se trata.
sábado, julio 30, 2005
No debería ser así
Y yo que quería contar alegrías.
Que estoy harta de hablar de mares de tristezas derramadas, pero lo necesito. Que me canso de esta lucha contra nada, del tirón en sentidos opuestos... de buscar ser centro por medio del dolor... y no debiera ser así.
Cómo hacer para encontrarme en otro lado. Para salir de este lugar tan molesto, tan destructor, tan cercano al sufrimiento (si no es que está dentro). Cómo hacer para correrme de acá.
29/o7
Pero ¿qué alegrías puedo contar? Sí la alegría de estar viva, de tener gente que me ama y a la que amo.. pero otro viernes en casa y muero un poco. Pasan las horas y yo sigo muriendo. Pasa el tiempo y no me divierto... no vivo... no nada. No debería ser así. No debería quejarme, si tengo tanto. No debería putear por tener ganas de bailar y no poder, no tener con quién. Por tener ganas de correr en un espacio en el que apenas si entro. Ni enfermarme para encojerme, porque las fuerzas se van y dejo de ser libre, ya el espacio es mayor pero de qué sirve si no hay combustible para esta vida... se me agota, me agoto, me aburro de estar así, de tanta monotonía. No debería ponerme mal para justificarme.
domingo, julio 24, 2005
Rumbo equivocado
Fría ciudad, envuelta en neblina.
encamina su alma a un callejón sin salida.
Enciende los ojos,
para no dejar apagarse la vida.
Busca escapar de la trampa
en la que ya está metida.
Ciudad traicionera,
le abre otra herida.
Vientos veloces, hielan las noches,
y empujan su cuerpo
a dejarla perdida.
Ya no ve nada, quemó sus pupilas
al intentar, con fuego, mantenerlas prendidas.
Queda atrapada, en el suelo tendida,
ha condenado a su alma, ha quedado vacía.
miércoles, julio 20, 2005
Hoy, siempre.
Yo que caigo y toman mi mano. Desespero y calman mis ánimos. impidiendo que clave el puñal.
Ellos que ríen si estoy riendo, que se entristecen cuando estoy sufriendo. Que en las noches frías hacen falta, en días grises. Que también están para compartir mi alegría. Que llenan un poco mi alma vacía.
Sepan, si hoy estoy acá es porque se me cruzaron en la vida... y siguen conmigo... pese a mí. Gracias por todo, por estar, por seguir... por ayudarme a vivir, a soñar.
Qué más puedo decir? Sepan que si soy rompe bolas, es porque los adoro.
voy a modificar muuuchas veces este blog... ta muy choto para lo que tendría que ser en su honor.
domingo, julio 17, 2005
Visitante inoportuno
Ya no intento siquiera escapar. Se adueña así de mi voluntad, de mis ganas de reir, de soñar, de vivir... de mis ganas. Posee a mi cuerpo, y yo actúo a su parecer. No sé de exorsismos para estirparla de mi ser, penetra en mi alma y todo lo nubla, se adentra en mi mente y de a poco la turba.
Quizá al menos debiera probar hecharla, pero es tanto su poder... Es tan repentina su aparición que no puedo cerrarle las puertas. Tan derepente aparece que me toma de sorpresa y me tumba al piso, se apodera de mí.
Lloraré hasta echarla. Gritaré mi dolor hasta que no pueda quedarse porque ya no tendrá de qué alimentarse. A pesar de ella, abriré mis brazos a los abrazos, aceptaré los hombros que se me brinden, recibiré el amor que me cuesta, y permitiré que me corran de las sombras para volver a reír.
Porque así es angustia, llega sin avisarme, se adueña de todo, lo destruye, y habiendo logrado su cometido, se va.
viernes, julio 15, 2005
Dormir temprano
Aveces las horas no alcanzan.
Los días son cortos.
Veinticuatro es poco... casi nada.
El mundo va rápido y yo corro para alcanzarlo.
Agotante vida de ciudad. Agobiante.
Aveces el no poder controlar el tiempo mata.
Se aquietan los segundos y el dolor no pasa.
Camino despacio para llegar tarde a casa... y nada.
Me entretengo en mil quehaceres, entro, salgo.
Pero el día no se acaba.
Me duermo temprano, para reposar mi alma.
Es que cuando dormimos el tiempo no importa... allí no nos alcanza.
jueves, julio 14, 2005
Ilusa
Recuerdos de una ilusión (persistente)
Revuelvo entre los recuerdos. No hace falta que busque mucho, ahí estás. Está tu sonrisa, esa mirada que no sé si fue sincera, no sé si le ví un destello que pintaba mi deseo o era real. Encuentro diálogos imposibles de enteder (entre mis nervios y mi pobre conocimiento de TU idioma), miradas fugaces y no tanto que decían "quiero estar con vos" -al menos las mías, siempre sinceras-, una noche inolvidable pese a no haber sido perfecta (y es que no tienen que serlo... verdad?). Me veo en la distancia y te encuetro en todos mis pensamientos (no te fuiste de ahí todavía, como verás).
Paro de buscar y me doy cuenta de que no es necesario seguir revolviendo en la memoria, porque estás grabado e cada célula mía, en cada deseo (me ví, mientras te buscaba en los recuerdos, pidiendo un segundo con vos a cada estrella fugaz, bajo cada túnel -sin respirar, como me inculcó Sil-), estás en cada lectura (sobre todo en las Valerianas escrituras a "su" -real- Lucas, en mí con mi envidia), en mis retinas, en mi tacto, mi olfato, mi gusto... te quedaste en mis labios.
Estás; y noto que no quiero sacarte, que quiero que seas vos... quiero que sea nuestra historia, ya no la de mis deseos.
Me dijiste que no, que no me iba a arrepentir. Que uno se arrepiente de lo que NO hace. Yo ya no sé si me arrepiento o no. No sé si agradecer ese instante fugaz que alimentó más mi ilusión, que me hizo esperarte más cada tarde, que me hizo creer que te gustaba... si me arrepieto de haber hecho una de esas dos o tres llamadas telefónicas (esa que me hizo trizas para que después llames vos y me dejes deseándote más aún). Llamadas en las cuales las palabrsa fueron más claras que estando en el mismo lugar y momento (será que no necesitábamos palabras si nos teníamos en frente?), que me hicieron sentir que algo, por poco que sea, te importé... No sé, si puedo ser feliz porque pasó; es que sé que no quedan más que recuerdos de la ilusión y su insistencia en hacerme creer que algo podría llegar a pasar, aún sabiendo que a duras penas de mí te acordás. No sé, si dejarla -a la ilusión- regar los verdes de una esperanza sin sentido, o ayudar a que se marchiten.
Demasiado de mí
Y los veo tan felices y los odio, los envidio, los amo, y así quiero que estén... pero cuesta... cuesta porque yo no puedo, yo no me dejo... yo... me cansé tanto de 'YO'; no sé cómo escaparme, como cambiar para no necesitar hacerlo, o aceptarme para no quererlo.
Me rindo. Me alejo un rato de mí, y me veo a lo lejos. Desde ahí casi me gusto. Casi, porque del todo no me fui. ojooo!! con esto no quiero decir que me gustaría a mí misma si me veo desde afuera!! Solo que no me juzgaría tanto (creo que vale aclarar :P)
martes, julio 12, 2005
Pese a esa parte mía
Cómo cortar con eso que me ata? Tomar fuerzas, dar el tirón que rompa los lazos sin destrozarlos.
Cada vez se hace más fina la cuerda, se gasta con el tironeo y aunque una parte dice que no, pese a mí misma -de a poco- voy partiendo.
Sólo eso. Decir que me cuesta, que tengo ganas pero duele saber que partir es dejar tanto... algo de mí. Es hacerme responsable y afrontar que no todo me va a salir bien, y no voy a tener a quién echarle la culpa. ayay... intento.
(y aveces siento que no es una soga, es un elástico, y coanto más me alejo más fuerte es el efecto de atracción, como si de golpe todo el miedo me invadiera y me hiciera volver, para tener que vencer el temor y, otra vez, afrontar el dolor que (me?) causa crecer.
domingo, julio 10, 2005
Una más
Bueeeeeeeeeeeehh... he de unirme a la manada. Quizá encuentre en esto un canal para desviar el caudal de pensamientos, aveces tormentoso, otras apacible, tranquilo... iluminado por una paz que en otros momentos me parece tan agena...
Intentando no sentirme una pelotuda (o no sentir que me leen como tal), venciendo mis prejuicios (cuyo destinatario soy nada más y nada menos que yo), empiezo a escribir, corriendo el riesgo de estar escribiendo solo para mí -que estaría bueno poder, en realidad-, con la certeza (y el miedo) de que nadie se va a interesar en lo que escriba.
Por suerte, ahora es uno de esos momentos en los que al menos creo que no me importa nada, de que me chupa un huevo (aunque que no tenga), el entrar y ver que nadie leyó y/o comentó. Pero sé que es mentira... y bueh...
En fin, para no alargar esta pseudo-presentación (pedorra)... me despido, agradeciendo los buenos ratos en los que nos damos un respiro y descansamos del dolor, y más aún, esos en los que nos creemos invencibles, y a trompadas detenemos a la tristeza que nos quiere atrapar en su abrazo traicionero (ese que luego asfixia y casi mata), aunque no sea más que para luego caer rendidos a sus pies. Seguiré luchando para no tomar su mano.
(como siempre, termino sin decir mucho... y hablando demasiado)
Así soy yo... :S