sábado, junio 25, 2016

Explicando(me)

No quiero usar mis ''defectos'' como excusa. Si expongo algunas características (que no me agradan, vale decir) no es para justificarme. Solo busco que se entienda, que se ME entienda. Recordar que hay sentires diferentes, que los sentires son irracionales. Que puede haber reacciones inesperadas. Que cada incomprensión duele profundo y ni sé si tengo, pero siento que llega al alma. Que mis arrebatos no pasan por necedad sino por necesitar más tiempo para que la razón haga entender al impulso, que los míos son otros tiempos, como serán porpios los de cada uno. No, tampoco justifico estos impulsos, pero son eso... y no siempre se pueden frenar. Que en los espacios y círculos íntimos es donde más se complica.
Perdón, talvés ni es el lugar para esto. Pero ando insomne, con ruido de fondo... y no paro de pensar.

jueves, junio 16, 2016

El tiempo volvió a rodar...

La radio a pleno a las seis de la mañana, no sea cosa que perdamos el día de playa que no perdamos un segundo de cada día...
Yo desde el septiembre pasado pensaba que el tiempo se había detenido y me mostraste que las agujas siguen girando. Que se aprovecha hasta el último suspiro. Que la vida no nos espera, que hay que seguir, siempre, hay que seguir luchando...

Las indicaciones para llegar a destino, 'no aceptes bebidas de extraños', 'mirá la bandera'... noticias catastróficas a toda hora, Fé como el mayor legado.
Música, tv, radio, lecturas, compañías de esa mujer sola, que tenía gente amiga en cada rincón.
Aunque me quejé de tantas cosas, esas mismas condimentaban el día a día y me nutrieron de experiencias, paciencia (o no tanto).
No me imagino qué será ahora de mis veranos sin la salida a la feria, las idas al supermercado que poco a poco fueron disminuyendo porque tu cuerpo ya se estaba quejando.
Los almuerzos solo nuestros, el paso cada vez más lento que no exigía ser esperado.
Quién va a blanquear mi ropa, contarme historias, hablarme hasta el cansancio? Estar allá sin vos va a ser tan raro... ya no habrá una canción para cada momento, la exigencia de entrar a la casa y lavarse las manos. La creatividad a la orden del día, el buscar actividades hasta dentro de los armarios.
Ni quise darme cuenta de que te estabas apagando, que te dolía cada hueso y lo callaste solo para poder seguirnos el paso. Tardé en entenderte, en abrazarte. Esperaba tener un poco más de tiempo, ahora que empezaba a comprender un poco más, a vivir en carne propia, que en esta tierra estamos de paso. Pero el tiempo no me dio tiempo, y decidió acabarse (a mi gusto) muy temprano.

Queda esta mezcla de dolor y de alegría, estas ideas desconexas, y el amor eterno desparramado por todos lados.
Espero no se me haya escapado demostrarte cuanto te amo.

sábado, junio 04, 2016

AnJo

Vivir en crisis. En eterna duda. Vivir desconfiando de la realidad. Buscando. Huyendo. Vivir entre la guerra y la paz, justito ahí en el medio. Corriendo con grilletes, volando con un yunque atado a los pies, gritándole al vacío, escuchando la ensordecedora nada llena de un todo tan caótico... Vivir refugiada en la tempestad, recogiendo espinas... disfrutando de las flores.
Vivir confundida, pero completamente segura de ser lo que soy, en un espacio que no habito, en un cuerpo que no domino, pero yo, siempre yo. En una piel que muchas veces no contiene, en un torrente de emociones que me lleva, me agita me hunde y me ahoga para surgir en plena algarabía gritando que estoy viva. Vivir ajena al contexto, inmersa en él y tan ausente, vivir extremamente presente. Sentir la vida en cada músculo, en cada pelo, en cada hueso, en las vísceras, y con la vida, sentir en cada centímetro de mi cuerpo su alegría y su dolor. Experimentar en lo más hondo de mi ser cada sentimiento.
No sé qué es vivir si no es eso...
tanto pasado en este presente de futuro tan incierto...